Terminó la espera, como cada cuatro años, el mundo se vuelca por una sola emoción que gira en torno a un balón que es pateado por veintidós jugadores en cada partido y así ver como una nueva selección levanta la anciada copa de la FIFA en señal de que es la mejor de éste planeta llamado Tierra.
Cuarenta años después, México se presenta en el partido inaugural del Mundial, ahora contra la anfitriona Sudáfrica, y como si fuese premio, Felipe Calderón estuvo presente en el Soccer City quitado de la pena ante un país que hasta los gringos se meten para asesinar mexicanos y vive uno de los peores momentos de su historia ya que el calienta sillas presidenciales es la versión reencarnada de Antonio López de Santa Anna: vendiendo patrias, cobrar impuestos a lo bruto y permitir invasores en el territorio nacional.
No conforme con su mal gobierno, Calderón saló -literalmente hablando- el partido inaugural, ya que la selección mexicana tuvo cantidad de llegadas que no fueron concretadas y así evitar que se aguadara la fiesta de los sudafricanos, hasta la selección anfitrona estrelló un balón en el poste en la recta final del partido evitándo así la caída del cuadro mexicano y tener otra inauguración de pesadilla.
Pero futbolísticamente hablando, pareció que Javier Aguirre no ha asumido su responsabilidad de haber armado el cuadro base con el que México debería estar jugando el mundial, todavía sigue en el "sí se puede" ya que sigue experimientando, lejos de establecer un cuadro ganador, éste que presentó hoy se notó más cauteloso, jugando a no perder. Cabe destacar que al principio México se fue al frente sorprendiendo a propios y a extraños, estuvo a punto de abrir el marcador en varias ocasiones, sin embargo, la férrea defensa sudafricana y la falta de tino por parte de Guillermo Franco hicieron que no hubiera la sorpresa y mucho menos alegrar a millones de aficionados mexicanos que hoy desayunaron cerveza y cacahuates.
Sudáfrica se fue al frente con un golazo que ningún arquero en el mundo iba a alcanzar, la desilusión se estaba haciéndo presente tanto entre la fanaticada mexicana como en los seleccionados nacionales en una señal clara de que Felipe Calderón si había salado a la selección, pero los "negros" mexicanos no se quedaron cruzados de brazos y gracias a Rafael Márquez anota el gol en señal de "ya se pudo" con el que se empató el juego.
Ojalá que Javier Aguirre no haga una alineación "destinada al fracaso" y que entienda que Paul Aguilar y Guillermo Franco sólo se pasean en la cancha y no aportan nada, en esos lugares tendrían que estar desde el prinicipio Alberto Medina y Javier Hernández para aportar en el ataque, mientras que el Giovanni dos Santos hoy demostró su futbol y a mi punto de vista fue el mejor jugador de la selección mexicana en el terreno de juego porque atacó jalando marcas, abriendo espacios y metiéndo buenos pases que lamentablemente Franco y Vela no pudieron concretar, también bajaba para recuperar balones en la mitad del terreno de juego.
Terminando el partido, todo México volvió a sus actividades, me imagino que lo mismo sucedió en todas las ciudades pero acá en Guadalajara estaba el tráfico vehicular insoportable.
Y para terminar, confieso que hace unos meses había soñado que México perdía 1-0 contra Sudáfrica, me alegro de que sólo halla sido eso, un sueño.
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