Anteriormente, un "antro" era para referirse a un centro nocturno de mala muerte, llámese casa de citas o bar de barrio. Con el paso del tiempo, las nuevas generaciones de jóvenes adoptaron ese nombre para referirse a las discotecas. Hoy en día, mejor referencia no podrían tener.
Nuevamente en Guadalajara se dio un caso de violencia, donde un joven de 25 años murió asesinado en el antro "Vogue", otrora Mood, ubicado en la esquina de Av. Patria y Guadalupe, se dice que todo fue producto de una riña y según la redacción de el periódico Mural (Reforma), están detenidas cuatro personas. Esto ya es un problema grave ya que estamos hablando de que ni los centros nocturnos, ni los ayuntamientos, son capaces de proporcionar seguridad a sus consumidores, que supuestamente sólo buscan diversión.
El problema es que uno ya no sabe con quién se topa en estos centros nocturnos, lamentablemente existen tipos bravucones que no toleran ni que los miren y ya están buscando bronca, lo peor es que los famosos "guarros" o "cadeneros" están sólo para fastidiar a los chavos que quieren entrar al lugar, pero nunca revisan bien qué es lo que la persona lleva consigo, te pueden quitar unos chicles o regresarte a la casa porque traes tenis, pero jamás verifican si alguien trae una pistola o navaja.
Dejemos de asistir a esos lugares, seamos exigentes, no es posible que vayamos en buena onda a consumir y a disfrutar un rato para que nos salgan con un servicio pésimo y sumamente caro, cobran bastante bien tanto la entrada como las botellas para que al final no se tenga garantía de estar seguros y bien servidos.
También los Ayuntamientos no hacen su trabajo, permiten que estos lugares hagan lo que quieran, cuando en realidad tendrían que estar dando rondines en cada establecimiento para verificar que las cosas están en orden, sobre todo en la seguridad, pero no lo hacen.
Exhorto nuevamente a ser exigentes con estas personas, no ir a los antros hasta que la seguridad esté garantizada, además, opciones para divertirnos hay muchas.
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